Leí un artículo interesante en la revista Expansión, una pieza escrita por Adina Chelminsky, y la verdad me hizo sentir un poco incómoda cómo redacto su nota tengo aquí una parte "Asistir en persona a esta reunión anual de accionistas es un suceso sui genéris, una mezcla entre peregrinar a Tierra Santa y conocer a los Beatles. No sólo por la magnitud del evento en sí, sino por tener la oportunidad de presenciar la sabiduría y el magnetismo de un hombre que predica el evangelio del capitalismo y del value investing con tal fervor y conocimiento de causa, que pudiera haber convertido a Karl Marx en creyente del libre mercado"
Ella hablaba de una reunión anual que Warren Buffet en Omaha Nebraska, un hombre fascinante para muchos por ser la epítome del éxito, por ser millonario que en nuestros días es ser exitoso, el tener el control de muchas empresas y acciones de otras tantas, lo hace ser el hombre del momento, incluso ha escrito en su página Web que no da consejos sobre inversión.
Aunque seguramente lo que hizo y hace Warren Buffet es fabuloso, tener dinero debe ser fantástico, pero de ahí a elevarlo como deidad es algo diferente, tal vez porque todos los seres humanos merecen tener el mismo respeto, o mejor dicho nadie debería tener tanto poder ni tanto dinero.
Supongo que él se lo ha ganado, él ha hecho su trabajo, y sería genial poder decir que lo que hacemos lo hacemos bien, me gustaría ser igual de buena en educación.
Buffet es una leyenda, Karl Marx no hubiera sido convencido de las bondades del libre mercado, hubiera usado a Buffet como ejemplo de las desventajas del capitalismo, tanta gente muriendo y países enteros sin comida, niños muriendo todos los días, eso no es responsabilidad sólo de él, pero si nos exigen en la medida en la que nos dan, creo que él tiene una deuda mayor que la mía, y cabe aclarar que yo también soy un poco materialista, tengo ropa que no me sirve y zapatos que no uso, comida que se queda en el refrigerador por días que podría servir para alimentar a alguien.
Creo que debemos admirar al que se desprende de todo esto, al que es capaz de vivir con menos para poder ayudar a más personas, al que no le importa el lujo pero se desvive por meter más gente a su casa, por el que se preocupa por que las personas estén acompañadas y no por el número de cuartos que tiene su casa, esa es la gente a la que le debemos dedicar artículos, porque es mucho más raro hacer eso que lo que Warren Buffet hace, si tuviéramos ese dinero seríamos igual, acumularíamos dinero de la misma manera, nos encantaría que hablaran así de nosotros.
Yo admiro a la gente que se puede desprender incluso de sí mismo para ayudar, yo todavía no lo he podido hacer, tal vez es la fuerza de voluntad, tal vez es miedo, flojera, egoísmo, no lo sé, pero la gente que puede hacerlo, esa es la gente que merece ser llamada leyenda.
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